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Solveit
Por Álvaro Mata Guillé Publicado em Costa Rica, Literatura, Poesia a 16 de Dezembro, 2020 964 palavras
Raul Bopp e o modernismo no Rio Grande Do Sul Anterior Seguinte

Solveit,
poseída por un ensueño,
convive con la ilusión en los adentros del bosque,
le acompaña el viento que de tanto en tanto se posa en las rocas,
el susurro de las hojas que se esconde en las sombras, adormecido por el mutismo,
            que al cubrir la añoranza,
invade la casa de piedra,
eternizándose en la quietud de las flamas,
en la indiferencia de la bóveda azul
que huye hacia el horizonte
;

presentimos su llanto,
el dolor enclaustrado en la tiniebla,
el deseo,
            que al besar los rostros que atrapa el humo,
fosiliza el sentir recluyéndose en el silencio,
en la oscuridad que baña las paredes

resignada
a la rutina de un día de otro en el vacío,
la nostalgia sedimenta el hollín que empaña los pocos muebles,
a las caricias diluidas en el espejismo,
disueltas en la efeméride
cayendo
            como hojas
                        en la lejanía
;

a veces, 
            cuando las horas pesan en la mutación de su encierro,
Solveit,
sale a conversar con los árboles que dormitan
al lado del mutismo que acosa el sendero,
junto a la penumbra que reposa en la nieve y
enluta el sigilo que reaparece con la tarde en el ocaso,
corriendo detrás de las siluetas que se disipan en la bruma,
                                                                                                            como fantasmas,
contándoles de su ilusión,
de la larga espera,
del delirio sometido a la vejez de lo eterno,
al letargo que le carcome,
aprieta el pecho, aprisiona la garganta,
derruye los dedos
;

una pálida sonrisa,
disimula el ahogo posado en la añoranza,
el monólogo de pasos que se arrastran por las ramas,
el retumbo que viene de la hojarasca,
el tiempo detenido,
el tiempo sin tiempo,
                                    sin espacio
                                                 sin murmullo,

el tiempo de otro tiempo abandonado al fulgor,
                                                                                    que al perpetuarse
evade el titubeo,
seca la piel,
petrifica lo transitorio,
corroe lo incierto que humedece la lluvia,
la que suponemos la misma al caer siendo otro eco,
al sol,
que es otra sombra que encubre la noche
;

lo mismo,
            lo distinto
las sombras carcomiendo los muchos días,
las voces perdiéndose en la niebla,
en el abismo
.

Solveit
olvida el entorno,
se olvida de sí,
regresa otra vez al pasado que vuelve sin ser realidad ni pasado,
sólo huesos
;

al ensueño,
como Penélope recluida en el silencio,
mirando hacia la bóveda de piedra,
                                                            al firmamento,
lo mismo,
            lo distinto,
                        lo muerto.

*Del libro (inédito) “La bóveda de piedra”. 

**Solveit, personaje de la obra “Peer Gynt”, de Ibsen.

Álvaro Mata Guillé: Poeta, ensayista, director teatral. Coordinador del Corredor
cultural Poesía en tránsito, del Festival Internacional de poesía En el Lugar de los Escudos
(Ciudad de México) y del Festival Del Norte-Poesía en tránsito, (Monterrey). Algunos
de sus libros: “Debajo del viento”; “Una serpiente sin alas”; “Un país sin nombre; “Más
allá de la bruma”. Columnista en Libros y Letras (Bogotá, Colombia).
https://www.librosyletras.com/search?q=%C3%81lvaro+Mata+Guill%C3%A9


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